Un
viaje
atípico
por los
Pirineos Orientales
Es uno de los principales atractivos turísticos de la región y uno de los símbolos del País Catalán. El Tren Amarillo de Cerdaña, también conocido como el «canario», comunica la ciudad de Vilafranca de Conflent, situada a 427 m de altitud con la ciudad de Latour de Carol encaramada a 1.232 m de altitud. El recorrido de 63 km supera un desnivel de 1.200 m y pasa por Bolquère donde a 1.593 de altitud se encuentra la estación de tren de mayor altitud de Francia.
La línea ferroviaria, abierta hace ya más de un siglo, requirió la edificación de 650 obras de ingeniería, entre estas 19 túneles y dos puentes magníficos: el puente Gisclard (de 80 m de altura) y el viaducto de Séjourné (de 65 m). Si estas construcciones permiten al Tren Amarillo jugar con el relieve, ofrecen además a los que lo toman sensaciones a más no poder, ¡en especial cuando el tren sortea el vacío!
Durante la temporada alta, los coches descubiertos permiten a los apasionados de los paisajes pirenaicos y a los simples curiosos disfrutar de unas vistas privilegiadas. Para comprar los billetes para el Tren Amarillo de Cerdaña, vaya a una de las 22 estaciones de la línea.